lunes, 26 de mayo de 2014

"El cáliz de Melqart" en la Feria del Libro de Madrid


Tras la memorable presentación de El cáliz de Melqart en el café Comercial el pasado miércoles, con la participación de Olalla García y Jaime Alejandre, espléndidos como siempre, y la presencia de muchos amigos, llega ahora el esperado encuentro anual con los lectores en la Feria del Libro de Madrid. Estaré firmando ejemplares de mis novelas el próximo sabado 31 de mayo, de 18:00 a 21:00 horas, en la caseta de Firex 21 (nº 29). Si tenéis ocasión, me alegraría mucho que os pasarais.

Nos vemos en la Feria.

jueves, 15 de mayo de 2014

EL CÁLIZ DE MELQART, de ARTURO GONZALO AIZPIRI: Presentación en el Café Comercial el 21 de mayo


Parecía que no llegaría nunca, pero ya está aquí. Después de cinco años tras la publicación de El heredero de Tartessos, llega mi nueva novela, igualmente ambientada en la Ispania de los Bárquidas: El cáliz de Melqart. Y si ver aquella entre mis manos me produjo ya una sorpresa maravillada y feliz, esta lo hace aún más. La razón es que la novela es la expresión de una inmensa gratitud: la que siento hacia todos aquellos que me hacen el regalo de querer conocer las historias que cuento. No es el hecho de escribir lo que me convierte en escritor; es algo que le debo a los lectores que comparten conmigo lo que escribo.

Así que no he tenido más remedio que reincidir. Asumo toda la responsabilidad, aunque alguna han tenido los insensatos que me han animado a seguir adelante: Ángela y los míos, Javi y Sandra de ediciones Evohé, mis intravagantes amigos, la comunidad de Hislibris (Ariodante, Farsalia, Nausícaa y tantos otros), los amigos del mundo de la literatura, la arqueología y la historia, los que se han interesado en todo tipo de foros por lo que hago, los que me han seguido en el blog y en facebook; todos ellos me han mostrado una generosa indulgencia que me esfuerzo por merecer. El cáliz de Melqart es, en gran medida, vuestro. Ahora llega el momento de esperar opiniones, y de descubrír cómo la historia que yo concebí se convierte en algo mucho más interesante y diverso cuando pasa por el tamiz de los lectores. Es algo incomparable. Como ya he pasado por ello, ahora puedo disfrutarlo, plenamente, con conocimiento de causa.

En el capítulo de agradecimientos merecen hoy una mención especial Olalla García y Jaime Alejandre, grandes escritores y amigos, que se han brindado a presentar la novela el próximo miércoles 21 de mayo a las 19:30 en el Café Comercial de Madrid. Junto a ellos, me acompañará mi editor, Javier Baonza. Ello me permite aseguraros que merecerá la pena asisitir a la presentación en todo caso. Si tenéis ocasión y os podéis pasar, me encantará veros. Y si no, tal vez en otra ocasión: no tardaré en volver a la carga con otras presentaciones y con fechas de firma en la Feria del Libro.

Así que un abrazo y nos vemos pronto.

Sinopsis

Tras la muerte de Amílcar Barca, su yerno Asdrúbal se pone al frente de la administración cartaginesa en Ispania. Con el apoyo del joven Aníbal logra importantes victorias diplomáticas y militares e inicia la construcción de una nueva capital: Qart Hadasht. Los éxitos de los Bárquidas despiertan el recelo de Roma y de sus rivales políticos en la propia Cartago, y parecen hacer inevitable el enfrentamiento con los pueblos íberos que se mantienen libres, en especial con los oretanos de Hélike, dirigidos por Orissón. Un suceso inesperado cambia súbitamente el tablero de juego. El legendario cáliz del dios Melqart, sobre el que se fundó el antiguo reino de Tartessos, regresa del pasado y desencadena un vendaval de rivalidad y ambición, de lealtades e intrigas, que precipita la lucha por el dominio de la península ibérica. El cáliz puede proporcionar la legitimidad para unificar a los pueblos íberos bajo una nueva dinastía. O acaso sirva, precisamente, para evitarlo. El destino de Ispania y el curso del enfrentamiento entre Roma y Cartago dependerán de ello. Tras el éxito de El heredero de Tartessos, Arturo Gonzalo Aizpiri vuelve a recrear el tiempo turbulento y apasionante en que los cartagineses dominaron el sur de la península Ibérica.

Y si no podéis esperar a que llegue a vuestra librería y necesitáis comprar ya el libro:



sábado, 10 de mayo de 2014

El viento que pasa y acaricia (Elvira Daudet con su "Cuaderno del delirio" en Libertad 8)


Cuaderno del delirio, de Elvira Daudet, es uno de los libros de poesía que me han dejado una huella más profunda. Lo releo con frecuencia, y nunca dejo pasar la oportunidad de escuchar sus poemas recitados por la propia Elvira. En Elvira vida y poesía son las dos caras de una moneda que nos deja estremecidos, sin aliento. El próximo miércoles, en el café Libertad 8, tenemos la oportunidad de encontrarnos con Elvira, una mujer que nos dice de sí misma:

Soy el viento que pasa y acaricia,
detenerme y morir sería lo mismo.

La presentará Carmina Casala, otra poeta superlativa. Si estáis en Madrid, no dejéis de ir.

El libro termina diciendo:

¿Qué esperanza esconde como un paño la muerte
que aguarda en un cajón de la mesilla?
¿Acaso es la sonrisa última de la vida
o el mandato supremo, irrevocable,
transmitido por los supervivientes
que habitan en mi sangre desde siglos?,
es difícil interpretar los signos.
Al borde del abismo avanzo a ciegas,
sin comprender quién soy ni lo que espero.

¿Qué se puede añadir?

jueves, 1 de mayo de 2014

¡Larga vida a Hislibris!


Ayer echó el cierre Hislibris Tabernae, y allí estuvimos un puñado de fieles (y otros muchos en la distancia) para tomar una última caña a la salud de Amparo y Carmen y de tantísimos momentos de risas, amistad y conversación que hemos pasado en el local desde que abriera sus puertas con el nombre de El Caldito. Fue allí donde conocí a Javi, Barto, Sandra y muchos otros amigos de Hislibris en las memorables jornadas de "Cervezas y Libros", y allí donde hace cosa de un año me incorporé al proyecto ya con plenitud de armas y bagajes.

Pero ayer no se impuso ninguna sensación de final, sino de inicio de una nueva etapa de Hislibris que entraña la oportunidad de seguir haciendo grandes cosas. Cómo podría uno desanimarse después de los extraordinarios Encuentros que vivimos el pasado fin de semana.

Aunque haya transcurrido poco tiempo, mucho se ha escrito ya desde entonces sobre ellos: ahí están los hilos de Hislibris y los comentarios y crónicas de muchos hislibreños en Facebook y en sus blogs.





Leyéndolos, es imposible no sentirse contagiado del entusiasmos de una comunidad de gente que sabe que comparte algo muy valioso y que está deseando disfrutarlo y brindárselo a otros. Eso es lo que se me inoculó inadvertidamente tan pronto como crucé el umbral de El Caldito hace ya un lustro. Richar, Javi y el resto de los padres fundadores dejaron en Hislibris una impronta de sentido del humor, hospitalidad e idealismo, tolerancia y respeto a los demás, que hoy sigue siendo la espina dorsal del código genético de la comunidad.

Yo mismo he disfrutado como pocos de esa capacidad de Hislibris de dar la bienvenida y proporcionar un espacio de compromiso a quien quiera colaborar. El viernes pasado, durante la inauguración de los Encuentros en el espléndido Museo Arqueológico Regional que dirige mi amigo Enrique Baquedano, se me concedió, para mi sorpresa y felicidad, el Celedonio honorífico que señala al Hislibreño del Año. Aunque huelga decir que, como todas las expresiones de amistad, es una distinción que no se corresponde con los méritos de quien la recibe, sino con la generosidad e indulgencia de quien la otorga. 

Todos sentimos que los Encuentros no han puesto punto final a un año, sino que han dado el pistoletazo de salida a otro lleno de promesas. Cierra la Tabernae, pero buscaremos nuevos espacios para seguir viéndonos y disfrutar juntos de la Historia y la palabra (¡y las cervezas!); haremos que ese décimo aniversario que se asoma al horizonte sea algo realmente inolvidable. ¡Larga vida a Hislibris!