En épocas de hostilidades (y lo fueron casi todas) la vida en los poblados amurallados íberos -los oppida- no pudo desprenderse nunca de un cierto compás de espera. Los que llevaban a cabo sus actividades cotidianas en los alrededores del oppidum durante el día, o se refugiaban en su interior durante la noche, esperaban siempre la voz de alerta que anunciara la proximidad del enemigo, o el regreso de los guerreros propios al término de sus correrías.
Sandra Delgado nos retrata uno de esos momentos en esta espectacular
ilustración del libro de arte de la Trilogía de Aníbal. No diré ni
siquiera a qué libro corresponde, para evitar cualquier posibilidad de spoiler.
Espero que os guste la riqueza narrativa de la escena, con tantos personajes
representando su papel, y el impresionante juegos de luces y sombras con que Sandra le da vida.
Como de costumbre, os dejo algunos de los párrafos en los que se inspira la escena:
Desde el
valle subía al galope un tropel de guerreros a caballo. El karnyx bramó para darles la bienvenida una y otra vez, uniendo su
tremor al del retumbar de los cascos, hasta que al frente de los jinetes fue
visible la enseña con la cabra de Cirmo, flanqueada por la oriflama de Hélike.
Adara sintió un estremecimiento de orgullo: nunca desde el tiempo de sus padres
habían dejado de ondear juntos los estandartes de ólcades y oretanos,
defendiendo el honor y la libertad de ambos pueblos, ahora contra Roma, como
antaño contra Cartago. [...]
Al llegar frente a la muralla, siguiendo la tradición ancestral de los ólcades, Gerión descendió del caballo y golpeó con el pomo de la espada sobre la puerta de la ciudad.
Para conocer los libros de la Trilogía de Aníbal:
El cáliz de Melqart (Premio Hislibris Mejor Novela Histórica Española 2014)
La cólera de Aníbal (Premio Hislibris Mejor Autor Español de Novela Histórica 2019)
Y no olvidéis que las ilustraciones de Sandra pueden obtenerse en impresiones artísticas de gran calidad en:
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