jueves, 1 de mayo de 2014

¡Larga vida a Hislibris!


Ayer echó el cierre Hislibris Tabernae, y allí estuvimos un puñado de fieles (y otros muchos en la distancia) para tomar una última caña a la salud de Amparo y Carmen y de tantísimos momentos de risas, amistad y conversación que hemos pasado en el local desde que abriera sus puertas con el nombre de El Caldito. Fue allí donde conocí a Javi, Barto, Sandra y muchos otros amigos de Hislibris en las memorables jornadas de "Cervezas y Libros", y allí donde hace cosa de un año me incorporé al proyecto ya con plenitud de armas y bagajes.

Pero ayer no se impuso ninguna sensación de final, sino de inicio de una nueva etapa de Hislibris que entraña la oportunidad de seguir haciendo grandes cosas. Cómo podría uno desanimarse después de los extraordinarios Encuentros que vivimos el pasado fin de semana.

Aunque haya transcurrido poco tiempo, mucho se ha escrito ya desde entonces sobre ellos: ahí están los hilos de Hislibris y los comentarios y crónicas de muchos hislibreños en Facebook y en sus blogs.





Leyéndolos, es imposible no sentirse contagiado del entusiasmos de una comunidad de gente que sabe que comparte algo muy valioso y que está deseando disfrutarlo y brindárselo a otros. Eso es lo que se me inoculó inadvertidamente tan pronto como crucé el umbral de El Caldito hace ya un lustro. Richar, Javi y el resto de los padres fundadores dejaron en Hislibris una impronta de sentido del humor, hospitalidad e idealismo, tolerancia y respeto a los demás, que hoy sigue siendo la espina dorsal del código genético de la comunidad.

Yo mismo he disfrutado como pocos de esa capacidad de Hislibris de dar la bienvenida y proporcionar un espacio de compromiso a quien quiera colaborar. El viernes pasado, durante la inauguración de los Encuentros en el espléndido Museo Arqueológico Regional que dirige mi amigo Enrique Baquedano, se me concedió, para mi sorpresa y felicidad, el Celedonio honorífico que señala al Hislibreño del Año. Aunque huelga decir que, como todas las expresiones de amistad, es una distinción que no se corresponde con los méritos de quien la recibe, sino con la generosidad e indulgencia de quien la otorga. 

Todos sentimos que los Encuentros no han puesto punto final a un año, sino que han dado el pistoletazo de salida a otro lleno de promesas. Cierra la Tabernae, pero buscaremos nuevos espacios para seguir viéndonos y disfrutar juntos de la Historia y la palabra (¡y las cervezas!); haremos que ese décimo aniversario que se asoma al horizonte sea algo realmente inolvidable. ¡Larga vida a Hislibris!





16 comentarios:

  1. ¡Larga vida, sin dudarlo! ¡Lo que nos queda por ver...!

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  2. ¡Ya lo creo, Farsalia! Un gran abrazo.

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  3. Seguiremos siempre. Llevaremos ese rincóncito de Madrid siempre con nosotros en el corazón, pero Hislibris seguirá en la nube y pronto encontraremos otro lugar físico de obligada visita cuando nos acercamos a la capi :P

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  4. ¡Larga vida! Fue realmente un placer conocerte, Arturo y también al resto de los hislibreños. Es una experiencia muy recomendable, casi tanto como la excelente charla que diste con Javier. Enhorabuena por todo :)

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  5. ¡Claro que sí, Nausicaa! A ver si en esa próxima visita tuya vamos probando con algún sitio nuevo. Un abrazo.

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  6. ¡Igualmente, Lucie! Fue genial, poder conocernos y hablar de lo divino y de lo humano. Espero que no tardemos un año en volver a vernos.

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  7. Siempre quería decir. El espíritu hislibreño se ha visto fortalecido tras el encuentro del 25 y 26 de abril. Larga vida y próximos encuentros por siempre.

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  8. Bien dicho Íñigo. Por cierto, fue estupendo que finalmente pudiéramos vernos las caras.

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    1. El placer fue mutuo amigo, a falta de más tiempo y oportunidad. Demasiadas caras nuevas para llegar a todo. Pero me fui encantado con ganas de mucho más. Lástima vivir en provincias.

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    2. También tiene sus ventajas. Estaría genial organizar en Pamplona una presentación del Cáliz y tomarnos una caña tranquilamente.

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  9. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  10. Grande Hislibris. Me vienen a la memoria los buenos instantes vividos en el encuentro de Barcelona; inolvidable. Felicidades por el premio Arturo.

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  11. Gracias, Hagakure. Vaya, precisamente el de Barcelona me lo perdí yo por un imprevisto laboral de última hora. ¡A ver si en el siguiente tenemos ocasión de conocernos!

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  12. ¡LARGA VIDA A HISLIBRIS! Da por tomada esa última caña en la distancia con vosotros, por los buenísimos momentos pasados allí este año. Enhorabuena por el merecido premio, Arturo. Un fuerte abrazo, Marta

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  13. ¡Gracias, Marmotarroja! Pero no nos faltarán sitios donde seguir haciendo cosas nuevas. Un abrazo.

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